El piojo (del latín “pediculus humanus capitis”) es un parásito que habita en el cabello y se alimenta de la sangre humana, la cual succiona a través del cuero cabelludo. Tiene 6 patas y mide alrededor de 3 mm. Prolifera a temperaturas de 82 a 84 oF; por ello, le gusta permanecer cerca del cuero cabelludo y, a menudo, no puede verse fácilmente.

El signo más obvio es una picazón en el cuero cabelludo, causada por las mordidas en el lugar donde los piojos succionan la sangre. Si sospecha la existencia de una infestación de piojos, deberá observar de cerca e inspeccionar las raíces del cabello cerca del cuero cabelludo. Un peine para liendres de dientes finos puede ser muy útil si desea verificar si son piojos o no. El peine le ayudará a descubrir las liendres que a menudo pueden confundirse con caspa: las liendres blanquecinas y algo brillosas son envoltorios vacíos de donde los piojos ya han salido, mientras que las liendres de color gris amarronado están en su fase de desarrollo. A veces es más fácil ver las marcas de las mordeduras en el cuero cabelludo que los mismos piojos. Las marcas de las mordeduras pueden parecer como pequeños puntitos rojos o puntos elevados de inflamación.

Los piojos no pueden volar ni saltar, generalmente se transfieren durante el contacto directo de cabeza a cabeza, que es el motivo por el cual se propagan frecuentemente en las escuelas y los campamentos de verano, donde los niños trabajan o juegan con sus cabezas cerca unas de otras.